15 de julio de 2016

Hematuria - Sangrado en la orina


La hematuria se define como la presencia de un número anormalmente elevado de eritrocitos (sangre) en orina. En condiciones normales pueden aparecer 1-2 eritrocitos por campo en el sedimento urinario, que pueden aumentar tras la práctica de ejercicio físico intenso. Hablamos de macrohematuria o hematuria franca cuando es visible a simple vista (orina rojiza o marrón), y de microhematuria o hematuria encubierta cuando sólo se detecta en el examen de laboratorio.


Debemos distinguirse  si la hematuria es transitoria o persistente. Las causas más comunes de hematuria transitoria son: fiebre, infección, traumatismo, infecciones urinarias y neoplasias. 

El médico debe realizar una historia clínica y una exploración física completas. Interrogar sobre la presencia de fiebre, síndrome constitucional, ingesta de fármacos, exposición a sustancias tóxicas, síndrome miccional y lesiones cutáneas. Los datos clínicos pueden orientar sobre el origen de la hematuria.



La orina con sangre puede deberse a un problema en los riñones o alguna otra parte de las vías urinarias, como:
          Cáncer de la vejiga o de los riñones
          Infección en la vejiga, los riñones, la próstata o la uretra
          Inflamación de la vejiga, la uretra, la próstata o el riñón (glomerulonefritis)
          Lesión en el riñón o la vejiga
          Cálculos renales o cálculos en la vejiga
          Enfermedad renal después de una faringitis estreptocócica (glomerulonefritis posestreptocócica), una causa común de sangre en la orina en los niños
          Insuficiencia renal
          Poliquistosis renal
          Procedimiento reciente en las vías urinarias, como cateterismo, circuncisión, cirugía o biopsia del riñón.



Si no hay ningún problema estructural o anatómico con los riñones, las vías urinarias, la próstata o los genitales, el médico puede verificar para ver si usted tiene un trastorno hemorrágico. Las causas pueden incluir:
          Trastornos hemorrágicos (como la hemofilia)
          Coágulo de sangre en los riñones
          Medicinas anticoagulantes, como ácido acetilsalicílico (aspirin) o warfarina
          Anemia drepanocítica
          Trombocitopenia (cantidad baja de plaquetas)

La sangre que luce como si fuera de la orina realmente puede provenir de otras fuentes, como:
          La vagina (en las mujeres)
          Eyaculación, a menudo debido a un problema de la próstata (en los hombres)
          Una deposición


La orina también puede tornarse de un color rojo a raíz de ciertos fármacos, remolachas u otros alimentos.

¿Cuándo acudir al médico?
  

Debe acudir al médico si también presenta:
  • Molestia al orinar
  • Micción frecuente
  • Pérdida de peso inexplicable
  • Micción urgente

Llame a su médico de inmediato si:
  • Tiene fiebre, náuseas, vómitos, escalofríos o dolor en el abdomen, el costado o la espalda
  • Es incapaz de orinar
  • Está eliminando coágulos de sangre en la orina


16 de abril de 2016

El rechazo


El sistema inmunológico de su cuerpo está diseñado para buscar y destruir cuerpos extraños que encuentre en su cuerpo, como el virus de un resfriado, el virus de la gripe o el órgano trasplantado
El proceso de destruir el cuerpo extraño, el órgano trasplantado, se llama rechazo. El rechazo ocurre cuando el sistema inmunológico de su cuerpo responde a la presencia del riñón trasplantado. En realidad, el rechazo demuestra que su sistema inmunológico está funcionando. Sin embargo, en los pacientes trasplantados, esta respuesta inmunológica necesita ser suprimida (con medicamentos inmunosupresores como tacrolimus, ciclosporina, ácido micofenólico) para proteger el riñón trasplantado.
Existen varios tipos de rechazo de riñón. Estos tipos se describen por la clase de células que causan el rechazo, cuándo ocurre el rechazo y por la gravedad del rechazo.
El rechazo hiperagudo ocurre en minutos después del trasplante de riñón. Esto ocurre cuando los anticuerpos del trasplantado reconocen inmediatamente
el riñón como extraño y lo atacan. El rechazo hiperagudo usualmente no puede ser tratado y resulta en la pérdida del riñón.
Un examen especial llamado compatibilidad cruzada se completa antes del trasplante de riñón para identificar anticuerpos que pudieran causar el rechazo hiperagudo.
El rechazo agudo acelerado ocurre dentro de los primeros 3 a 7 días después del trasplante de riñón. Es causado por anticuerpos que pudieran haber sido inactivos en el momento del trasplante pero que poco después se reactivaron. Esta forma de rechazo es difícil de tratar, pero ha habido mejoras recientes en los tratamientos para esta clase de rechazo.
La forma más común de rechazo es el rechazo celular agudo. En este tipo de rechazo, las células sanguíneas del cuerpo identifican el riñón como ajeno, formando un ejército de células para atacar al riñón. Aunque el rechazo agudo puede ocurrir a cualquier hora, aproximadamente 15% a 25% de los recipientes trasplantados tienen por lo menos un episodio leve a moderado de rechazo agudo dentro de los primeros 3 meses después del trasplante. El rechazo agudo puede ser tratado.
Tener un rechazo agudo no significa que usted perderá su riñón trasplantado, pero es muy importante que el rechazo sea diagnosticado y tratado tan pronto como sea posible. Para ayudar a detectar el rechazo, usted debería hacerse sus exámenes de sangre periódicamente como se lo requiera su médico y cualquier síntoma que esté experimentado.
Si el proceso de rechazo no se resuelve completamente, o si continua lentamente por un período de tiempo, se le llama rechazo crónico. El rechazo crónico es más difícil de tratar debido a los cambios más permanentes del tejido renal.

¿Cómo sé si estoy rechazando mi riñón?

Una lesión al riñón puede ser causado
por rechazo, infección, o los efectos secundarios de los medicamentos. Midiendo las pruebas de función renal (urea, creatinina, electrolitos, examen de orina) regularmente y observando el patrón de los resultados puede ayudarle a su médico a decidir que le está pasando a su riñón.
Su médico  nefrólogo podrían sospechar que usted tiene rechazo si cualquiera de estos números están más elevados que el rango normal.
¿Cuáles son los síntomas del rechazo?
Después de realizado el trasplante renal, sus análisis de sangre serán monitorizados con menos frecuencia. Si ocurre rechazo, usted podría experimentar algunos síntomas leves, aunque algunos pacientes puede que continúen sintiéndose bien por un tiempo. Los síntomas iniciales más comunes incluyen:
  •     Fiebre de más de 38°C 

  •     Aumento de los análisis de la función 
renal (urea y creatinina) 

  •     Disminución del volumen de orina 

  •     Dolor sobre el injerto 

  •     Hinchazón de las manos, párpados o de 
las extremidades inferiores 

  •     Aumento de peso de 1-2 kgs 
en 24 horas 


Adicionalmente, su médico solicitará que se haga una biopsia renal para confirmar que sus síntomas son causados por rechazo.
¿Cómo se trata el rechazo?
El rechazo no significa que usted perderá su riñón, pero el diagnóstico y el tratamiento tempranos son muy importantes para evitar las complicaciones.
El rechazo leve a moderado es tratado aumentando la inmunosupresión.
La cantidad y/o frecuencia de sus medicamentos anti-rechazo usualmente están incrementadas. Si está
tomando prednisona, la dosis puede ser aumentada. Si no está tomando prednisona se la podrían recetar por algunas semanas para tratar el rechazo. Algunas veces la forma IV de prednisona se administra por varios días para tratar el rechazo que no se resuelve con la prednisona oral. Otra forma de tratar el rechazo es añadir o combinar otros medicamentos anti-rechazo como el mofetil micofenolato, tacrolimus, ciclosporina o la azatioprina.
El rechazo grave es tratado como
se indicó anteriormente, pero otros agentes que afectan más fuertemente
el sistema inmunológico son utilizados. Los medicamentos más comúnmente utilizados para el rechazo severo del riñón es la timoglobulina. Este medicamentos son administrados en el hospital por la vía intravenosa, y los pacientes son monitorizados de cerca para asegurarse de que el problema de rechazo se está resolviendo.

Mientras que el problema de rechazo se resuelve y su riñón se recupera, las dosis adicionales de estos medicamentos anti- rechazo podrían disminuirse o finalizarse. El nivel de su medicamento anti-rechazo principal, usualmente el tacrolimus o la ciclosporina, podría ser reducido.
La meta es tenerlo con el nivel más bajo posible de inmunosupresión para que no rechace
su riñón y tenga una buena función renal. La imunosupresión más baja también contribuye a disminuir el riesgo de infección y otros efectos secundarios ocasionados por los altos niveles de los medicamentos inmunosupresores.
Usualmente, el rechazo del riñón puede ser tratado exitosamente si es detectado a tiempo. Es importante tomar todos sus medicamentos exactamente como se los han recetado para ayudar a evitar el rechazo.

¿Qué es una biopsia renal?
Aunque sus síntomas y las pruebas de función renal ayudan a diagnosticar el rechazo, una biopsia del riñón confirma si el riñón está siendo rechazado. Se examina una pequeña parte del tejido del riñón bajo un microscopio para buscar signos de rechazo.

El procedimiento de la biopsia usualmente es hecho como paciente externo o durante una estancia corta en el hospital. Para prepararse para la biopsia, el área en donde su riñón fue colocado, se limpiará con una solución antiséptica.
Le administrarán un anestésico local inyectado, o un medicamento para adormecer el área en donde se realizará
la biopsia. 


Usualmente se realiza un ultrasonido para determinar el mejor
lugar para insertar la aguja de la biopsia. Después de que el área está adormecida, el médico le introducirá una aguja especial en el riñón para sacarle un pedazo pequeño de tejido. Podría parecerse a un pequeño pedazo de cuerda. La biopsia solo toma unos segundos. El tejido es puesto en una solución especial y llevado al laboratorio de patología para ser procesado y visto bajo el microscopio por un nefropatólogo. Los resultados de su biopsia podrían estar listos dentro de uno a dos días. Podrían pedirle o preguntarle que regrese a la clínica para discutir los resultados de su biopsia y cualquier tratamiento que pudiera ser necesario.

Después de la biopsia del riñón, necesitará descansar en la cama durante 8 horas. Su enfermera lo monitorizará por cualquier complicación relacionada a la biopsia por medio de sus signos vitales, evaluación física, análisis de sangre - orina y/o quejas físicas. Su orina será revisada para detectar la presencia de sangre (hematuria).
La mayoría de pacientes se sienten bien después de la biopsia de riñón. Algunas veces el sitio de la biopsia podría doler un poco, como una magulladura, durante un día o dos. Después de la biopsia, es común una pequeña cantidad de sangre en la orina, pero no debería estar extremadamente sanguinolenta o tener coágulos.
¿Tendré que preocuparme siempre acerca del rechazo de mi riñón?

El riesgo de rechazo disminuye con el transcurso del tiempo, pero el rechazo puede ocurrir en cualquier momento. Su médico nefrólogo discutirán los resultados de su biopsia, cambios en medicamentos y/o plan de tratamiento. La buena comunicación con su médico y seguir su rutina
de cuidado son factores clave para un resultado exitoso después del trasplante de riñón.
Para disminuir el riesgo de rechazo y monitorear los síntomas de rechazo, yo debería:
    Saber y entender los signos y síntomas 
del rechazo de riñón 

    Tomarme todos los medicamentos como 
me los han prescrito 

    Asegurarme de tener siempre un 
suministro de mis medicamentos 

    Mantener contacto regular con mi 
médico por cualquier cambio en mi inmunosupresión 

    Hacerme los análisis de sangre como se me indique 

    Darle seguimiento a los resultados de mis análisis de sangre con mi médico
    Llamar a mi médico si pienso que estoy experimentando síntomas de rechazo 


    Evitar el alcohol excesivo, drogas ilegales/recreativas y cualquier remedio o suplementos a base de hierbas 


4 de abril de 2016

Fiebre en trasplante renal

¿Qué es la fiebre?
La fiebre es el aumento de la temperatura corporal por arriba de la temperatura normal del cuerpo de 37° Celsius (C). La fiebre no es una enfermedad, sino que el síntoma de una enfermedad. La fiebre puede ser causada por una enfermedad sin importancia, así como también por una infección seria. La fiebre usualmente se define como una temperatura más alta que o igual a  38.5°C.

Si usted está tomando prednisona, su cuerpo podría no ser capaz de exhibir una fiebre alta, así que aún la fiebre baja, arriba de 38°C puede ser importante. Consulte con su médico el rango de la fiebre, es importante llevar un registro cuando presente fiebre. Asegúrese de saber que temperatura se considera fiebre para usted.

¿Por qué me puede dar fiebre?
En la población general, la fiebre puede ser un síntoma de un resfriado, gripe o cualquier otro tipo de infección. Ahora que usted ha tenido un trasplante de riñón, su sistema inmunológico está suprimido para que su riñón trasplantado no vaya a ser rechazado. Si le da fiebre después del trasplante de riñón, podría ser por un resfriado o gripe adquirido en la comunidad. Pero la fiebre después del trasplante, también puede ser un síntoma de rechazo, o de una infección específica relacionada  a tener el sistema inmune suprimido. La fiebre en el período postoperatorio inicial puede ser una infección relacionada con la cirugía o los procedimientos quirúrgicos.


¿Qué debo hacer si tengo fiebre?
Es muy importante que llame a su médico y/o coordinador de trasplante si tiene fiebre más alta de 38.5°C. Verifique con su coordinador de trasplante y pregúntele cuáles son las recomendaciones de su centro para llamar cuando tenga fiebre. Asegúrese de tener un termómetro cuando le den de alta y sepa como leerlo. Los termómetros digitales también están disponibles si tiene problemas para leer un termómetro de vidrio.



Si tiene fiebre, la mayoría de centros de trasplante recomiendan que usted:
·       Llame de inmediato a su coordinación de trasplante o su médico si su fiebre es de 38.4°C o más.
·       No tome ningún medicamento para tratar la fiebre hasta que se lo indiquen.




Dependiendo de que tan alta tenga la fiebre y de otros síntomas de su enfermedad, podrían decirle que tome acetaminofén (Tylenol®) o paracetamol. Asegúrese 
de tomar la dosis recomendada con la frecuencia apropiada usualmente cada 4 a 
6 horas.  También puede que le indiquen que se haga un análisis de sangre o que vaya a la Clínica de Trasplante, la clínica de su médico, o a la sala de emergencia local para que lo examinen.



Los productos con ibuprofeno (Motrin®, Advil®) algunas veces son utilizados para tratar la fiebre. Estos productos no deberían ser tomados por los pacientes trasplantados de riñón, a menos que
su médico se los indique. Aunque el ibuprofeno puede tratar las fiebres altas efectivamente, también puede afectar la función del hígado y del riñón. El ibuprofeno también puede causar irritación estomacal, úlceras y sangrado gastrointestinal.